jueves, 26 de octubre de 2017

Ioga na Universidade Popular


Retomamos de novo as clases na Universidade Popular de Ourense!!!
Martes e xoves de 12,00 a 13,30h
Comenzamos o 7 de novembro.
¡Benvidas as persoas inscritas!

miércoles, 18 de octubre de 2017

Esta vez no me tocó



No. A mí no me tocó el fuego. Esta vez.
Pero podría haberme tocado. Cerca anduvo, y un golpe de viento hubiera sido suficiente para arrasar más aldeas y más monte.

Ahora que la locura ha remitido, asoma la tristeza, el dolor y la desesperación. Me llegan de cerca las historias que nunca llegarán a la mayoría. Historias que se quedarán aquí, en la comarca. Historias espeluznantes y cercanas.

Bomberos sin medios superados por el descontrol, aldeas a su suerte asoladas por el fuego. Jóvenes toda la noche sacando en sus coches a todos los mayores de las casas. Habitantes en el sótano de una casa rodeada de llamas con toallas húmedas para poder respirar con la incertidumbre de morir abrasados, regueros de animales abrasados intentando escapar de las llamas... Personas que han perdido todo: sus casas, el monte que les rodeaba... personas que ha visto la muerte de cerca en forma de enormes llamas... y personas que ha muerto...

Hoy, una amiga agente de seguros, recorrió las aldeas quemadas de este lugar, para tramitar las indemnizaciones... Ella no podía hablarme sin que los ojos se le llenaran de lágrimas, sin que sintiera un dolor inconsolable y una tristeza inmensa. No quería contarme la dureza de lo que vio, escuchó y encontró. Un nudo en la garganta y sus ojos llorosos se lo impedían

Locura, sufrimiento. Recién empiezan a verse los resultados de esta barbarie. Historias que probablemente quedarán aquí, en esta Galicia sufridora.

Me quedo con lo que amo de Galicia: los vínculos que aún se dan en las aldeas, la unión y la capacidad de ayuda mutua... Papá Estado no apareció en los momentos necesarios. Ni ahora, ni durante otras catástrofes... Siempre, el pueblo gallego se ha apañado solo en los peores momentos

Creo en la gente de a pie que crea vínculos y redes humanas en el día a día, en las aldeas, en los pueblos. No creo en los políticos que demuestran, una vez más, la lejanía del pueblo y sus intereses creados que derivan en barbarie, dolor y sufrimiento de los más humildes

Sólo espero que podamos reflexionar sobre la vida que queremos, sobre la responsabilidad de cada uno en todo esto y en qué tipo de sociedad queremos vivir.

Con mucho amor a esta Terra Meiga que me acoge y a la que amo profundamente
Ángeles