domingo, 9 de febrero de 2014

No escapes de tus emociones




No hay que rechazar, ni minimizar, ni intentar huir de las emociones. Hay que experimentarlas, sentirlas plenamente hasta que de forma natural volvamos a sentir paz y plenitud. Pero para ello antes tendremos que haber convivido con ellas. Sentir la rabia, la ira, el enfado… hay que dar espacio a estas emociones y no aplazarlas, no esconderlas, no disfrazarlas ni luchar contra ellas. No hay que dejarlas “para otro momento”, ni pensar que desaparecerán si escapo de ellas… porque volverán, y cada vez con más fuerza, recordándome que tengo algo pendiente que solucionar conmigo mism@. 

En el momento en que facilitamos ese espacio a nuestras emociones, ellas nos ofrecerán la oportunidad de observar de dónde vienen y porqué siguen ahí y será entonces cuando tendré que hacer un ejercicio de honestidad y valentía conmigo mism@ para sentirlas, escucharlas, comprenderlas y entender que la vida me las está mostrando para que las transite y aprenda de ellas. Cuando las abrazo con esta apertura, ellas -que son una parte de mí que me estoy resistiendo a reconocer- me dirán adiós de manera natural, sin violencia ni resistencia

Namasté ♥

No hay comentarios:

Publicar un comentario